Objetivos
Determinar la necesidad de técnicas de imagen en pacientes pediátricos tras TCE.
Valorar los signos clínicos sugestivos de patología intracraneal.
Material y método
Revisamos retrospectivamente 92 pacientes pediátricos (edades entre 0-15 años) a los que se realizó TC urgente por TCE entre enero de 2009 y Diciembre de 2010 en nuestro centro. Recogimos de las historias clínicas los siguientes datos: edad,
mecanismo del traumatismo,
escala de Glasgow y datos clínicos relevantes por los que los pediatras solicitaron las pruebas de imagen.(Tabla I)
Previa a la realización de la TC craneal a 52 niños se les había realizado Rx simple de cráneo,
que fue revisada para valorar la presencia...
Resultados
Encontramos línea de fractura en 45 casos (86,5%) de las Rx,
cuya localización más frecuente fue la parietal. Solamente en 2 casos (4,3%) las fracturas fueron relevantes.
La TC resultó normal en 75 pacientes (81,5%). Pudimos visualizar la fractura en 29 niños (31,5%),
pero sólo resultó relevante en 4 de ellos (1 fractura en ping-pong y 1 diástasis de sutura lambdoidea que correspondían a las vistas en Rx y 2 fracturas fronto-orbitarias complejas).(Fig. 1) Para nuestra valoración estadística los casos en los que únicamente se...
Conclusiones
La TC patológica se asoció estadísticamente con las heridas y contusiones craneofaciales (RR 2,800,
IC95% 1,225-6,400) y con el resultado del Glasgow (media de 12,80 en TC patológico frente a 14,66 en TC normal,
p=0,006).
El modelo Multivariante de mayor capacidad predictiva de TC patológica incluyó las variables irritabilidad y heridas/contusiones.
No está justificado el uso rutinario de la Rx de cráneo en TCE infantiles.
El uso de TC debería llevarse a cabo de manera orientada por la clínica,
por ejemplo a partir de datos...