This poster was originally presented at the SERAM 2012 meeting, May 24-28, in Granada/ES. Este póster ha sido presentado originalmente en el congreso de la SERAM 2012, 24-28 de mayo, en Granada/ES.
www.seram.es
Type:
Presentación Electrónica Científica
Authors:
V. Castiñeira, M. Gomez Cabrera, A. Martinez Broquetas, E. Soriano Redondo; Huelva/ES
DOI:
10.1594/seram2012/S-0695
Objetivos
La hidatidosis es una zoonosis de distribución mundial producida por el estado larvario del cestode Echinococcus Granulosus. El hombre,
huésped intermediario se infecta de forma accidental por la ingesta de huevos (embrión hexacanto),
por el contacto de perros ,
ganado ovino,
caprino infectados o por el consumo de agua,
vegetales y otros alimentos contaminados. La localización hepática del quiste hidatídico representa la más frecuente.
El objetivo del presente estudio es describir las localizaciones poco habituales del mismo.
Ciclo Biológico del Echinococcus granulosus
El quiste hidatídico está producido por las larvas enquistadas de E. granulosus; es un verme plano de unos 5 mm de longitud,
constituido por 3 anillos y un escólex con doble corona de ganchos,
que habita en el intestino delgado del perro y de otros cánidos o y afecta sobre todo a las personas que tienen relación con ganado y a los dueños de perros contaminados.
La equinococosis tiene un período de incubación variable,
de meses a varios años,
en dependencia del número y la localización de los quistes y de la rapidez con que se desarrollan.
No se transmite directamente de persona a persona ni de un huésped intermediario a otro,
los perros empiezan a expulsar huevos del parásito alrededor de 7 semanas de la infección.
Los vermes adultos pueden sobrevivir durante 2 ó 3 años.
Los huevos salen al exterior con las heces del animal y contaminan el área donde son expulsados; pueden sobrevivir durante varios meses en los pastizales,
jardines y en los alrededores de las viviendas.
Si el hombre o algún animal ingiere estos huevos en los vegetales o la hierba contaminada,
se forman quistes en diversos tejidos; pero si el perro o algún cánido ingiere la carne o las vísceras del animal parasitado,
la pared del quiste se desintegra en el intestino y se desarrolla un nuevo gusano adulto; se cierra así el ciclo evolutivo del parásito.
El ciclo perro-carnero,
perro-bovino, o perro-cerdo,
es importante en la mayoría de las zonas donde E. granulosus es endémico y es la forma que tiene la parasitosis para perpetuarse en una región.
El contagio humano ocurre con frecuencia en la niñez,
al jugar los niños con los perros infectados o al ingerir agua o verduras contaminadas con los huevos del parásito.
Cuando estos llegan al estómago se destruye la capa de quitina del huevo por acción del ácido clorhídrico del jugo gástrico y se liberan los embriones hexacantos que atraviesan la mucosa gástrica e intestinal y llevados por la circulación portal,
alcanzan el hígado.
Gran parte de estos embriones son fagocitados y destruidos por el sistema mononuclear fagocítico,
aunque algunos evolucionan el estado de larva y se enquistan en el hígado y otros en pequeña cantidad embolizan en capilares pulmonares donde siguen una evolución semejante,
se enquistan en el pulmón o pasan a la circulación sistémica y se diseminan por el resto del organismo.