Los programas de detección precoz del cáncer de mama (PDPCM) que se llevan a cabo a nivel nacional se inician en la mayoría de los distritos a partir de los 50 años de edad, donde está comprobada la reducción de la mortalidad por cáncer de mama en hasta un 30%, siendo más controvertido el inicio en edades más precoces (40-49 años), ya que no está demostrado en base a estudios científicos una reducción de mortalidad tan alta y se supedita su realización a la relación coste/beneficio de cada comunidad autónoma.

En el distrito sanitario adscrito a nuestro hospital, se aplica el PDPCM en la población comprendida entre los 50 y 69 años y, a través de los médicos de atención primaria, a aquellas mujeres entre los 40 y 49 años que tuvieran algún factor de riesgo (antecedentes de primer o segundo grado…).

Desde hace un año aproximadamente se ha implantado un nuevo proceso asistencial en nuestro distrito, con unos criterios más estrictos, en el que se realizan estudios de imagen mediante mamografía y/o ecografía a aquellas mujeres entre 40-49 años asintomáticas con riesgo elevado (antecedentes familiares de primer grado) o con inicio de sintomatología (nódulo palpable, cambios cutáneos o periareolares, mastalgia no cíclica…).

Los objetivos que nos planteamos en esta revisión son valorar cómo se ha visto afectado este grupo de edad ante la implantación de un nuevo proceso asistencial (PAI: proceso asistencial integrado) en nuestro distrito y valorar una posible incorporación a los programas de cribado de cáncer de mama de estas mujeres.