El tabique nasal es una estructura medial en la que pueden asentar muchos tipos diferentes de patologías,
hasta pueden destruirlo haciéndolo desaparecer.
Las anomalías congénitas del tabique nasal son poco frecuentes y tienen características en los métodos por imagen,
bastante típicas,
que conociendo la anatomía normal,
podemos acercarnos al diagnóstico sin muchos inconvenientes.
Por el contrario,
muchas lesiones adquiridas tienen características inespecíficas de imagen,
por lo que su diagnóstico debe basarse también en las características del paciente y en la anatomía patológica.
Entre las causas más frecuentes de lesiones del tabique nasal,
existen los traumatismos,
infecciones,
toxicidad,
inflamación y menos frecuente los tumores.
Lesiones traumáticas puede resultar de una cirugía o de comportamientos repetitivos,
como rinotilexis (muy frecuente en nuestro medio).
El uso frecuente de los descongestionantes (vasoconstrictores y esteroides principalmente) y la cocaína también puede erosionar el tabique nasal.
Las bacterias,
micobacterias y hongos pueden causar infecciones del tabique nasal,
especialmente en pacientes inmunocomprometidos.
Las enfermedades inflamatorias que pueden afectar el tabique nasal incluyen sarcoidosis,
granuloma reparativo,
y la granulomatosis de Wegener.
Los tumores que pueden surgir en el tabique nasal o puede implicar secundariamente
son los carcinomas,
cordoma,
sarcoma,
angiofibroma,
hemangioma,
tumor neuroendocrino,
y schwannoma entre otros menos frecuentes.