La URO-CT es una técnica diagnóstica optimizada para visualizar riñones,
uréteres y vejiga mediante su examen con cortes finos (con TCMD),
con la administración de contraste iodado y adquisición de imágenes en la fase excretora renal (European Society of Urogenital Radiology)
Actualmente los TCMD permiten realizar estudios y obtener imágenes con alta resolución espacial y temporal,
esto sumado a las reconstrucciones en tridimensionales (3D) y multiplanares de gran calidad han hecho que la URO-TC sea el estudio de elección en el diagnóstico de patología del tracto urinario,
reemplazando a la urografía excretora (UIV)2.
Las indicaciones para la realización de la URO-CT son similares a las de la UIV,
pero la URO-CT ofrece mayor sensibilidad (95.8% vs 75%)1 .
Entre las más utilizadas está la evaluación de masas (tumores,
quistes,
etc),
traumas renales y de vías excretoras,
litiasis,
pielonefritis,
detección e identificación de anomalías congénitas,
además de las evaluaciones preoperatoria de la nefrolitotomía percutánea y la postoperatoria de las vías urinarias de las cistotomías3.
URO-TC clásico: consta de 4 fases:
– Fase sin contraste (abdomen-pelvis): búsqueda de litiasis.
Se debe comparar el realce de lesiones.
– Fase córtico-medular: sólo riñones 35-40 “
– Fase nefrográfica (sólo riñones,
90´´ aproximadamente),
posee la mayor sensibilidad para detectar masas renales y comparar realce inequívoco tras la administración de contraste.
– Fase excretora (abdomen-pelvis): realizada 5-15 minutos desde la inyección del contraste.
Para evaluar el urotelio.
El paciente no necesita preparación previa al estudio,
si hay que tomar en cuenta las alergias a contrastes yodados y los pacientes con historia de asma.
En la actualidad se realiza el protocolo de UROTC-Split bolus de contraste,
ya que implica menor dosis de radiación,
este protocolo consiste en solo dos fases:
- Fase sin contraste (baja dosis/dosis ultra baja)
- Fase mixta nefrográfica-excretora.
- i. Se inyecta 75 mL de contraste iv.,
seguido de un bolo de 150 mL de solución salina.
- ii. Se espera 8-10 min.
- iii. Se inyecta un segundo bolo de 75 mL de contraste y se inyecta 50 mL de solución salina nuevamente y se realiza la adquisición de imágenes con un retardo de 100 seg (fase nefrográfica).
Actualmente están en proceso de revisión los protocolos para:
- Optimización de la exposición a radiaciones ionizantes.
- Mejorar la visualización del “urotelio”.
En cuanto a la distensión ureteral esta puede ser difícil de conseguir debido a las contracciones peristálticas,
se deben de tomar medidas para contrarrestar esto,
como las siguientes:
- Hidratación oral: 1 L de agua 20-60´ antes.
– Mejora la visualización de los uréteres porque favorece la diuresis.
Además sirve de contraste negativo dentro de las asas intestinales.
– Puede mejorar la distensión de los uréteres aunque está en discusión.
Puede ayudar a diferenciar piedras intravesicales libres de los impactados en unión ureterovesical.
– Puede mejorar la distensión de uréter proximal.
No se han encontrado diferencias estadísticamente significativas cuando se realiza sin compresión.
- Infusión de suero salino.
– Resultados contradictorios.
No se usa de rutina.
Puede incrementar el peristaltismo.
– Furosemida 0.1 mg/kg hasta un máximo de 10 mg).
Se administra iv 1´ antes.
Mejoran la visualización de uréter medio y distal.
Estas técnicas disminuyen la atenuación de los uréteres y reducen el tiempo de retardo para adquirir la fase pielográfica.
Ventajas de la URO-TC.
- Permite la evaluación anatómica y funcional del tracto urinario,
es multiplanar,
posibilita la obtención de reconstrucciones y el tiempo de adquisición de las imágenes es corto.
- Es un estudio no invasivo,
confiable y la TCMD permiten reconstrucciones MPR con excelente resolución espacial.
- Tiene mayor resolución de contraste que la urografía excretora (UIV).
- TC permite ver paredes del tracto urinario y masas extrínsecas.
- Permite valorar causas extraurinarias de los síntomas.
- La complexión física y gas abdominal son menos determinantes en la visualización del tracto urinario que en la UIV.
- TCSC para búsqueda de litiasis: no requiere contraste (alérgicos,
IR,
etc).
- TC es más sensible (89-100%) y más específica que la UIV en la detección de lesiones de urotelio.
Desventajas
- Altas dosis de radiaciones ionizantes.
- Administración de contrastes yodados.
- Costo elevado.
- En pacientes con excreción asimétrica,
sobretodo en el caso de una obstrucción completa unilateral la falta de imágenes seriadas puede dar una información subóptima del sistema excretor del lado obstruido.
- El VPP de uro-TC aislado es bajo (53%) pero aumenta mucho cuando se acompaña de citología positiva en paciente con sospecha de neoplasias.