This poster was originally presented at the SERAM 2012 meeting, May 24-28, in Granada/ES. Este póster ha sido presentado originalmente en el congreso de la SERAM 2012, 24-28 de mayo, en Granada/ES.
www.seram.es
Type:
Presentación Electrónica Científica
Keywords:
Structured reporting, Education, Ultrasound, Mammography, Breast
Authors:
A. Cortés González, M. A. Garcia Sanchez, E. Ruiz Garcia, P. Sanz Rupp, A. Vilaplana López; Sevilla/ES
DOI:
10.1594/seram2012/S-1007
Objetivos
Durante varios años venimos comprobando que el seguimiento de las pacientes que se realizan mamografia o ecografia mamaria no es siempre el que nosotros consideramos más adecuado.
Se controlan imagenes típicamente benignas,
se hacen seguimientos excesivamente prolongados de lesiones Birads 3,
o algunas pacientes no se controlan con la cadencia o técnica que les corresponderia.
Todo esto,
ademas de una sobrecarga del sistema,
supone muchas veces un estres innecesario para la paciente,
que se catalogan a sí mismas como enfermas,
y que acuden a cada revision,
muchas veces anodina,
con una ansiedad desproporcionada.
El primer planteamiento que debemos hacernos es si nosotros mismos. los radiologos, estamos haciendo bien las cosas,
siendo claros y especificos en el informe en cuanto a las indicaciones de seguimiento de las pacientes.
Creemos que es nuestra misión como radiólogos,
especialistas en la imagen,
implicarnos en específicar el manejo de estas pacientes pues,
¿quién mejor que nosotros puede valorar la ausencia o el posible potencial maligno de una imagen y como seguir estudiándola?.
Hace muchos años dejamos de ser meros descriptores para implicarnos personalmente en cada paciente.
No podemos pues olvidar nuestro papel de directores de orquesta en un tema tan delicado como es la mama.
El objetivo de nuestro estudio es,
por tanto,
comprobar si las indicaciones que realizamos habitualmente en el informe radiologico de la mama son suficientes y adecuadas para un correcto seguimiento de las pacientes,
o si habría que ser más explícitos para facilitar que el clínico - en el caso de nuestro centro, ginecólogo o cirujano- solicite la prueba adecuada,
con la cadencia correcta en cada paciente,
según criterio radiológico.