Las principales estructuras intraperitoneales que contienen grasa son:
-epiplon mayor o omento (figura 1).
-mesenterio (figura 2).
Tanto el omento como el mesenterio son pliegues del peritoneo que contienen grasa y vasos sanguineos.
En el TC el omento se presenta como la grasa que hay entre la musculatura abdominal anterior y las asas ventrales de intestino delgado,
e incluye grasa omental,
vasos omentales y linfáticos.
El mesenterio de intestino delgado es un pliegue del peritoneo visceral que fija el intestino a la pared abdominal posterior.
En esta revisión vamos a valorar la necrosis grasa intrabdominal sin afectación de la pared intestinal,
que se va a presentar en tres cuadros clínicos:
-apendicitis epiploica.
-infarto omental.
-necrosis grasa encapasulada.
APENDICITIS EPIPLOICA
Los apéndices epiploicos son estructuras móviles de morfología pediculada,
formadas a partir del peritoneo visceral y que contienen tejido adiposo y pequeños vasos sanguineos,
que asientan en la serosa adyacente a la tenia coli del colon.
Son mas abundantes en colon izquierdo (sigma y colon descendente) y en ciego (figuras 2-3).
Ocasionalmente un apéndice epiploico puede presentar torsión o bien oclusión de su vaso central,
condicionando inflamación y eventualmente infarto isquémico agudo (figura 5).
Los estudios analíticos en pacientes con apendicitis epiploica suelen ser normales y el curso clínico habitualmente es autolimitado,
con tendencia a la resolución espontánea.
Los hallazgos típicos por TC son la existencia de una pequeña área de morfología oval y atenuación grasa aunque de mayor densidad que la grasa del peritoneo normal,
rodeada por un anillo periférico correspondiente al peritoneo visceral adyacente inflamado,
que constituye el "signo del anillo".
En ocasiones puede observarse en el centro un foco hiperdenso que corresponde a la vena trombosada o a hemorragia interna (figuras 6-8).
Evolutivamente puede cursar con calcificación,
frecuente en la necrosis grasa (figuras 11-12),
en ocaciones puede calcificar en forma de "cáscara de huevo",
pudiendo tambien desprenderse y caer como una calcificación libre a la cavidad peritoneal (figuras 9 y 10).
INFARTO OMENTAL
El epiplon mayor u omento es un gran pliegue peritoneal formado por las capas de peritoneo visceral del estómago y del colon transverso (figura 1 y 13).
Contiene grasa y vasos sanguineos.
El infarto omental es raro debido a la abundante circulación colateral,
no obstante el borde libre derecho tiene un aporte sanguineo menor que el resto del omento (figura 14).
A diferencia de la apendicitis epiploica,
puede presentarse en la infancia.
Por su patogenia puede ser primario o secundario.
El IO primario es a menudo un infarto hemorrágico debido al compromiso vascular (frecuentemente combinado por una reducción del flujo arterial y venoso) que cursa con estasis,
congestión,
edema y necrosis hemorrágica.
El IO secundario se debe a un traumatismo abdominal, a cirugía o a inflamación.
La presentación clínica suele ser como un dolor abdominal agudo,
mas frecuente en cuadrante superior derecho,
que puede simular una apendicitis aguda,
colecistitis,
diverticulitis,
apendicitis epiploica o patología ginecológica.
Suele cursar como un cuadro autolimitado y tener manejo conservador,
aunque puede requerir traamiento quirúrgico y puede complicarse con absceso.
En TC,
el infarto omental suele presentarse como una lesión ovoidea grande (> 3 cm.) de atenuación grasa,
con reticulación adyacente,
inicialmente mal delimitada y normalmente próxima a colon ascendente (figuras 15 y 18). Con el paso de los días el IO tiende a delimitarse mejor y a desarrollar un anillo denso,
visible a partir de una-dos semanas (figuras 16,17 y 19).
En ocasiones el IO se puede saponificar,
apareciendo un nivel líquido/graso,
que puede favorecer la sobreinfección y condicionar un absceso (figuras 20 y 21).
Como en otras necrosis grasa,
puede producirse una calcificación periférica.
NECROSIS GRASA ENCAPSULADA
Proceso degenerativo del tejido adiposo maduro que se puede dar en cualquier parte del cuerpo,
siendo mas frecuente en miembros inferiores y en las mamas.
Su origen parece ser postraumático o isquémico y puede cursar en ocasiones con dolor abdominal agudo/subagudo.
Radiológicamente presenta características similares a las descritas para el infarto omental (figura 22).
En el diagnóstico diferencial se ha de incluir el liposarcoma.