Type:
Presentación Electrónica Científica
Keywords:
Arteries / Aorta, Neuroradiology brain, Interventional vascular, Catheter arteriography, MR-Angiography, CT-Angiography, Diagnostic procedure, Arterial access, Outcomes analysis, Aneurysms, Haemorrhage, Blood
Authors:
C. López Redondo, M. E. Perez Montilla, E. Roldán Romero, E. Jimenez Gomez, S. Romero Martín, F. Bravo Rodriguez; Córdoba/ES
DOI:
10.1594/seram2014/S-0497
Objetivos
La hemorragia subaracnoidea (HSA) es una emergencia neurológica con una morbilidad y mortalidad elevadas que,
con los avances terapeúticos,
en la actualidad se estima entre el 10 y el 24%.
Ocupa el 5% todos los eventos neurológicos de disfunción cuya manifestación inicial se caracteriza por cuadro clínico de inicio súbito.
La incidencia es de unos 10.5 por 100.000 personas/año,
siendo más frecuente en mujeres y en pacientes de edad entre 40 y 60 años.
Su manifestación inicial suele ser la cefalea,
que en ocasiones puede aparecer incluso semanas antes del sangrado.
La HSA se caracteriza por la extravasación de sangre al espacio subaracnoideo o leptomeningeo,
siendo la causa más frecuente el traumatismo.
La hemorragia subaracnoidea espontánea se define como la que no muestra relación con traumatismo craneoencefálico.
Dentro de estas HSA espontáneas,
en la literatura se describe que un 75-80% de los casos puede deberse a rotura de aneurismas.
Otras causas no aneurismáticas de la HSA pueden ser las malformaciones arteriovenosas,
fistulas,
tumores,
vasculitis y disecciones de arterias cerebrales.
Pero está publicado que hasta en el 15-20% de los pacientes no se encuentra ninguna causa que justifique la HSA.
En estos casos donde no se evidencia causa el pronóstico suele ser mejor.
El objetivo de nuestro trabajo consiste en revisar la incidencia de HSA en nuestro medio,
dividiéndola en aneurismática y no aneurismática,
valorando la frecuencia y los hallazgos de cada una de las anomalías que pueden desencadenarla.