Type:
Presentación Electrónica Educativa
Keywords:
Neuroradiology brain, Abdomen, Paediatric, MR, CT
Authors:
T. Gamo Jiménez, I. Martín Lores, I. Millan Arredondo, E. Serrano Tamayo, M. Jorquera Moya, D. Llanos Pérez; Madrid/ES
DOI:
10.1594/seram2014/S-0664
Conclusiones
La presencia de manifestaciones comunes,
incluyendo tubers corticales o subependimales,
anomalías de la sustancia blanca,
rabdomioma cardíaco y angiomiolipoma renal,
nos permiten confirmar el diagnóstico en los casos con síntomas o lesiones características de la piel; pero también sospechar ET en nuevos casos sin signos clínicos.
El pulmón,
el aparato digestivo,
el retroperitoneo y el hueso,
que se afectan menos frecuentemente,
también deben ser evaluados.
La ET tiene una amplia variedad de manifestaciones clínicas y radiológicas.
La familiarización con el curso clínico,
los sitios afectos y la frecuencia en la que lo hacen,
nos permitirá un correcto tratamiento y mejora en la calidad de vida de los pacientes.