Se realizó una revisión de los pacientes diagnosticados de tendinitis calcificada del manguito rotador en nuestro centro que recibieron tratamiento percutáneo (aspiración y lavado) guiado por ecografía en el período de Octubre de 2009 a Marzo de 2013.
Los pacientes tratados fueron seguidos durante 6 meses: con un control a la semana,
otro al mes y,
el último,
a los 6 meses del tratamiento Fig. 1 En cada control se entrevistó al paciente recopilando datos respecto al dolor y la discapacidad funcional en el hombro afecto,
además se realizó una ecografía y una radiografía AP de hombro.
Los pacientes rellenaron un cuestionario llamado SPADI (Shoulder Pain and Disability Index questionnaire) justo antes de recibir el tratamiento y en el último control. Fig. 2 Fig. 3 Fig. 4
Los criterios de inclusión fueron los siguientes:
-Pacientes diagnosticados de tendinitis calcificada del manguito rotador con una calcificación de al menos 7 mm de diámetro confirmada con estudio ecográfico y radiológico,
realizado en nuestro Servicio justo antes del tratamiento.
-Ausencia de otra causa evidente del dolor y/o discapacidad funcional del hombro afecto.
-Pacientes que firmaron el consentimiento informado.
-Pacientes que cumplieron adecuadamente el seguimiento,
excluyéndose aquellos con pérdida o ausencia de información en alguno de los controles previstos.
Tras aplicar dicho criterios de inclusión,
el número final de pacientes incluidos en la revisión para el análisis de los resultados conseguidos con el tratamiento aplicado fue de 50 pacientes.
El diagnóstico y tratamiento fue realizado por 3 radiólogas de nuestro centro. En el informe del diagnóstico ecográfico y radiológico de la tendinitis calcificada se especificó el tamaño,
la forma y la localización de la calcificación.
Además se hizo una distinción de las calcificaciones en función de la apariencia ecográfica de las mismas: Fig. 5
-Calcificaciones pétreas: aquellas caracterizadas por mostrar un foco ecogénico lineal anterior y una sombra acústica posterior. Fig. 6
-Calcificaciones grumosas: aquellas caracterizadas por mostrar múltiples focos ecogénicos finos conformando "grumos" sin clara sombra acústica posterior.
Fig. 7
A todos los pacientes con el diagnóstico ecográfico de tendinitis calcificada del manguito rotador se les realizó una radiografía AP de del hombro afecto el mismo día antes de realizar el procedimiento.
En el informe se especificó si la calcificación era densa o menos densa,
bien delimitada o irregular (mal delimitada).
Según su apariencia radiográfica,
las calcificaciones se clasificaron en: densas bien delimitadas,
densas irregulares y no visibles. Las calcificaciones no visibles por radiografía en el momento del diagnóstico,
sólo se siguieron posteriormente por ecografía.
El material utilizado para el tratamiento percútaneo fue el siguiente: Fig. 8 Fig. 9
-Ecógrafo Philips modelo iU22 ,
sonda de alta frecuencia 5-12MHz
-Aguja subcutánea.
-Aguja intramuscular de ≤ 20G y de 4 cm de longitud.
-Jeringas con sistema Luer Lock (Rosca) de 10cc.
-Lidocaína al 2%
-Triamcinolona acetónido 40 mg (10-20mg en caso de pacientes diabéticos) [trigon depot 40mg/ml suspensión inyectable].
-Suero fisiológico,
gasas,
paños estériles.
-Camilla para el paciente con respaldo reclinable (inclinación a 45º).
Para el procedimiento,
se prepara una jeringa con una mezcla de 5cc de lidocaína al 2% y 5cc de suero fisiológico y se conecta a la aguja intramuscular.
Se coloca al paciente en posición semisentada y tras limpiar y esterilizar la piel,
se administra anestesia local subcutánea y se anestesia el trayecto hasta la bursa subacromiosubdeltoidea mediante un abordaje anterior y caudocraneal,
manteniendo durante todo el procedimiento la jeringa por debajo del punto de punción,
para facilitar la salida del calcio de forma espontánea (a favor de la gravedad),
y evitando aspirar directamente Fig. 10. Antes de atravesar la bursa se advierte al paciente que probablemente va a experimentar una sensación dolorosa y a continuación se avanza la aguja hasta el centro de la calcificación.
Mediante pequeñas percusiones con el émbolo de la jeringuilla,
se va abriendo una oquedad en el interior de la calcificación.
Se continúa con el procedimento durante aproximadamente unos 15-20 minutos.
Las jeringas se sustituyen por otras cuando adquieren un color turbio blanquecino por la salida de arenilla procedente de la calcificación Fig. 11 ,
finalizando el procedimiento cuando la calcificación se fragmenta o la mayoría de ella desaparece,
o cuando se advierte que ha pasado líquido inyectado a la bursa en una cantidad superior a 10cc (lo que indica que la calcificación comunica con ésta y que la percusión sobre la misma ha dejado de ser eficaz).
Finalmente,
la aguja se retira hasta llegar a la bursa donde se inyecta 1cc de trigon depot.
El mecanismo terapéutico radica en la combinación de un efecto mecánico: presión positiva (pequeñas percusiones del émbolo) y presión negativa (al soltar el émbolo tras la percusión) con la que se consigue fragmentar la calcificación y extraer el calcio; y un efecto químico por el ph ácido de la lidocaína que logra disolver los depósitos de hidroxiapatatia de calcio.
Las variables del estudio están descritas en la Fig. 12