Los cuerpos extraños abdominales son un problema frecuente con múltiples causas,
siendo muy diversos y variados,
tanto en su naturaleza como en su forma y tamaño.
En la mayoría de los casos se resolverán de forma espontánea tras realizar una vigilancia estrecha,
pero existe riesgo de complicaciones,
siendo las más frecuentes la obstrucción intestinal,
la perforación y la sobreinfección,
que a menudo requerirán un tratamiento quirúrgico urgente.
Causas:
La presencia de un cuerpo extraño intraabdominal tiene múltiples casas.
Las podemos diferenciar fundamentalmente en:
-Ingesta espontánea: dentro de este grupo estara la ingesta voluntaria (niños,
disminuidos psíquicos o problemas psiquiátricos,
pacientes penitenciarios) y la involuntaria (ingesta accidental) (Figura 1).
-Causas yatrogénicas: como son material quirúrgico olvidado de forma accidental o migración de material médico (Figura 2).
-Introducción de objetos por via rectal.
Clínica:
El 90% de los casos la ingestión de cuerpos extraños cursa de forma asintomática,
pasando inadvertidos.
La presencia de sintomtología dependerá de las aparición o no de posibles compicaciones,
lo cual esta en muy estrecha relación con la morfología del objeto:
-Objetos puntiagudos: ocasionan perforaciones de la pared gastrointestinal
-Objetos redondeados: obstrucciones intestinales.
Con todo ello,
la sintomatología clínica es variada: molestias abdominales vagas,
dolor abdominal tipo cólico,
náuseas y vómitos,
fiebre,
diarrea,
pérdida de peso,
obstrucción intestinal,
hemorragia digestiva alta y/o baja,
absceso intraabdominal,...etc.
Diagnóstico:
En los casos de ingesta involuntaria que ocurre de forma inadvertida el diagnóstico de sospecha es difícil,
ya que el período de evolución suele ser largo (mayor a 2 semanas en el 50% de los casos) y los pacientes no suelen relacionar sus síntomas con la ingestión de cuerpos extraños.
Incluso en ocasiones,
a pesar de la intervención quirúrgica,
no es posible identificar el agente causal de la perforación intestinal,
ya que pequeños trozos de madera o fragmentos óseos pueden ser digeridos y desestructurados en el proceso digestivo.
El diagnóstico preoperatorio suele ser: apendicitis aguda,
abdomen agudo,
perforación de víscera hueca,
oclusión intestinal o masa abdominal.
El diagnóstico diferencial se puede realizar con las siguientes entidades: linfadenitis mesentérica,
ileítis,
enfermedad de Crohn,
diverticulitis...
etc.
-Anamnesis: muchas veces será de poca utilidad.
-Exploración clínica: por la que se podrá sospechar presencia abdomen agudo.
-Analitica sanguínea: aunque no siempre están alteradas.
-Pruebas de imágen:
- La radiografía simple de abdomen será la primera prueba a realizar.
Permite detectar cuerpos extraños densos,
presencia de perforación,
signos de obstrucción intestinal...etc.
- Tc de abdomen: a ser posible,
tras la administración de contraste yodado.
Permite determinar las posibles complicaciones por la presencia de cuerpo extraño y ,
en muchas ocasiones,
determinar la naturaleza de éste.
- Ecografía: de poca utilidad ya que en la mayoria de las ocasiones el cuerpo extraño estara en interior de asas intestinales,
con mala visualización a causa del gas intestinal.
Puede detectar la presencia de coleciones y abscesos intraabdominales,
pero es de escasa utilidad para descartar otro tipo de complicaciones como la obstrucción intestinal y la perforación.
- En ocasiones,
la endoscopia digestiva,
la gastroscopia y la colonoscopia ayudan en el diagnóstico y tratamiento de ésta patología.
Complicaciones:
Las complicaciones son consecuencia del retraso diagnóstico y terapéutico,
pudiendo ser:
-Perforación,
tanto aguda como subaguda y crónica: fundamentalmente en caso de objetos punzantes. Las zonas de estrechez,
angulación o fondos de saco del tracto digestivo y en zonas de bridas son las zonas donde hay mayor número de perforaciónes,
ocurriendo en un 75% de los casos en el área ileocecal.
-Absceso intramural,
intrahepático,
subfrénico o intraabdominal.
-Fístula esofagoaórtica,
intestinal,
urinaria o enterocutánea.
-Migración del objeto a órganos vecinos.
-Obstrucción intestinal por impactación: Las zonas anatómicas de impactación de los objetos extraños que causan obstrucción intestinal son: esfínteres esofágicos superior e inferior,
píloro,
duodeno,
válvula ileocecal,
ciego,
apéndice y ano (Figuras 3,
4,
5 y 6)
-Hemorragia digestiva por erosión de la pared del tubo digestivo.
-Intoxicación por absorción del material degradado.
-Cuadro séptico.
-Fracaso multiorgánico.
-Defunción.
Tratamiento:
El tratamiento de las complicaciones es fundamentalmente quirúrgico,
mediante cirugía abierta por laparotomía exploradora,
comprobando la viabilidad intestinal,
con resección segmentos isquemicos.
En el caso de perforaciones,
la terapéutica antibiótica es imprescindible,
iniciándose antes de la propia intervención quirúrgica y prosiguiendo después de ésta.